¿Verdad que es un auténtico placer tomarse un cuenco de fresas con nata, o con chocolate, o solas…? Las fresas son una de nuestras frutas favoritas, y estamos de suerte, porque tienen propiedades diuréticas, antiinflamatorias y depurativas. Además, tienen una gran capacidad antioxidante y ayudan a combatir el deterioro cognitivo. A continuación te detallamos todos los beneficios de las fresas para que las añadas a tu dieta.
Como curiosidad, ¿sabías que el color de la fresa es debido a unos pigmentos vegetales (flavonoides), conocidos como antocianinas?
Fuente de vitamina C
Una de las propiedades más importantes de las fresas es que son una fuente muy destacada de vitamina C, con un porcentaje superior al que aporta una naranja. Una ración media de fresas (150 g), contiene aproximadamente 86 mg de vitamina C, mientras que una naranja mediana (225 g), contiene 82 mg.
Reducen los niveles de colesterol
Las fresas ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL, el conocido como ‘colesterol malo’, sobre todo gracias a su alto contenido en lecitina, pectina y ácido ascórbico. Por todo ello, añadir fresas a nuestra dieta también ayuda a nuestra salud cardiovascular.
Ayudan a perder peso
Otro de los beneficios de las fresas es que su consumo promueve la producción de dos hormonas, la adiponectina y la leptina, que ayudan a quemar grasa y a mejorar el metabolismo. Además, las fresas tienen una gran cantidad de fibra que acelera la digestión y ayuda a la evacuación intestinal.
Mejoran la salud de la piel
Otro de los beneficios de las fresas es que, debido a su alto contenido de agua, son una de las mejores aliadas para mantener la piel bonita y saludable.
Mantienen el cerebro joven
Un estudio del hospital Bringhan and Women’s de Boston, en Estados Unidos, sostiene que los frutos rojos, sobre todo las fresas y las cerezas, ayudan a mantener el cerebro más joven. Y es que, los flavonoides que contienen las fresas son excelentes aliados para optimizar las funciones cerebrales, ya que inhiben el estrés oxidativo.